viernes, 21 de noviembre de 2008

Capitulo 1 (parte2)

Un estrecho torrente de luz cruzaba por la ventana para adentrarse en los dormitorios de piedra, iluminando debilmente los camastros apilados contra la pared, y las figuras abultadas que se revolvian incomodas, aprovechando los ultimos minutos que les quedaban entre el sueño y la vigilia, ese maravilloso momento en el que la mente aun no ha vuelto al cuerpo y en el que, sin embargo, puede regodearse en la maravillosa sensacion del breve y corto descanso. Solo cuatro figuras estaban ya de pie, terminando de vestirse, y recogiendo sus objetos personales. Sus perfiles se recortaban en la penumbra, pero sus ojos, acostumbrados a la luz, parecian ver perfectamente cada detalle. Ninguno hablaba, y sus movimientos eran bruscos y torpes, aunque parecian poner el suficiente empeño para no despertar a sus compañeros. Obviamente, estaban nerviosos


Kepax no pudo evitar lanzar una ojeada a Helkin mientras se colocaba las hombreras de cuero en los hombros. Hoy no llevarian proteccion adicional alguna, a parte de esas ligeras capas casi inservibles. Entrabas a la prueba con lo minimo, y, en muchas ocasiones, incluso te lo arrebataban y debias realizarla con apenas una tela para tapar tus partes mas intimas. Helkin devolvio la mirada a Kepax, y alzo las cejas. Luego, sus ojos se desviaron rapidamente hacia Teodor, aunque solo fue un segundo. Kepax no dudo de que habia sido un gesto involuntario. Si bien todos pensaban lo mismo, ninguno se atrevia a decirlo, o siquiera a sugerirlo: Teodor iba a fallar. No estaba preparado. Era demasiado joven aun. Y sus compañeros, tanto los que ese dia realizaban la prueba con el como los que no, estaban preocupados por el. La prueba podria llegar a resultar peligrosa algunas veces, sobre todo para los que carecian de experiencia. Teodor era uno de ellos. Sus compañeros, Kepax, Helkin, y Yiltha, habian estado preparandose arduamente para ese momento. Pero Teodor, el mas joven, tenia casi un año de experiencia menos. Algunos dirian que tampoco era tanta diferencia, pero la prueba era algo totalmente distinto a los pequeños examenes de aceptacion que realizaban en las academias. El Gremio era la elite. Si no habias gastado hasta el ultimo dia entrenandote para ella, era una tonteria el intentarlo. Y, aun asi, los mayores habian decidido que Teodor estaria preparado


"Y un cuerno" Penso Kepax mientras acompañaba al resto fuera de los dormitorios. Antes de salir, dirigio una ultima mirada a sus compañeros, y se pregunto cuanto tardaria en despedirse de ellos, si es que conseguia ingresar en el gremio, o en unirse de nuevo a sus filas, si es que la fallaba...


En ese aspecto, Kepax lo tenia muy claro: El iba a intentarlo hasta que lo consiguiera. Daba igual cuantas veces fallara, no le importaba cuantos años tenian que pasar para ingresar en el gremio. Desde pequeñito habia tenido un sueño: Ser como esos misteriosos aventureros de los que todos hablaban con tanto respeto, y cruzar bosques, montañas, y llanuras combatiendo a los enemigos en nombre del imperio. Ahora sus sueños eran mas maduros, pero este dia se cumplirian todos. Ya que el mas importante era ese: Superar la dichosa prueba que tanto tiempo habia ansiado realizar. Una vez lo lograra, no tenia claro que deseaba hacer. Sus objetivos terminaban ahi. Suponia que acabaria realizando los encargos que le mandasen y divirtiendose en alguna taberna en sus ratos libres. Una vida como siempre habia deseado. Sin mas complicacion que la de como vencer al siguiente enemigo, o la de como sobrevivir al proximo encargo. Y en las venas del guerrero corria la adrenalina como la savia en un arbol. Podia desear algo mas???


-Nerviosos?-Pregunto Yiltha mientras jugueteaba con el mango de su pequeña daga, enfundada en su cadera


-Un poco, la verdad- Le respondio Helkin, mientras dirigia una mirada preocupada a Teodor, el cual, sin duda, destacaba por su palidez- Y estos comentarios son justo lo que necesitamos para conseguir calmarnos


Yiltha le dirigio una sonrisa, y luego le saco la lengua. Kepax rio disimuladamente, y luego se apresuro a añadir


-Tranquilos. No es tan dificil como lo pintan, o al menos eso me han dicho


-Me fio mas de esos estudiantes retorcidos que de tus fuentes- Solto Helkin mientras le dirigia una sonrisa de desafio a Kepax


Los cuatro compañeros caminaban por los pasillos de piedra, hacia la sala de espera. Ese dia no desayunarian. El dia de la prueba se realizaba en ayunas hasta que todos terminaban. Se vigilaba rigurosamente que ninguno de los aspirantes comiera nada. Hace unos años, un mago de tierra fue cogido llenandose el estomago en la despensa una hora antes, y fue eliminado de la prueba directamente, por lo que normalmente nadie se atrevia a intentar contradecir las normas. Al menos, que Kepax supiese. Aunque los rumores eran habituales en un lugar donde convivían veinticuatro horas al día unas veinte personas como mínimo, y solía oirse de todo


Cuando llegaron a su destino, Kepax no pudo evitar detenerse unos segundos. Ninguno de sus compañeros parecía atreverse a abrir la puerta, como si dentro hubiera algún dragón de leyenda esperando devorarles. El silencio reinó en el ambiente unos segundos, y, al final, Kepax tomó la iniciativa


-Vamos, chicos. Ahora, o nunca


Con lentitud, casi con ceremonia, empujó el picaporte y observó como las bisagras giraban lentamente. Delante de ellos se mostró un jardín de un tamaño respetable y de forma circular. El centro del gremio. El único punto de encuentro entre los estudiantes y aprendices de las distintas disciplinas que allí se impartían. Normalmente solía estar vacío a estas horas, pero, debido a la fecha señalada, ya se habían formado algunos grupillos de personas que cuchicheaban nerviosas. En medio del jardin, junto a la fuente tallada en piedra, que representaba a cuatro personas, cada una de ellas ataviada según las disciplinas del gremio (magos, guerreros, clérigos y estudiantes), un hombre observaba a Kepax y a sus compañeros con expresión indiferente. Antes de que estos reaccionaran, ya andaba en su dirección, y se plantó frente a ellos, repasandoles con la mirada con lentitud

-Para el exámen de guerreros, supongo

Los cuatro asintieron en silencio

-Dadme vuestros nombre- Continuó con voz monótona, como si todo el asunto le resultase mortalmente aburrido -Y Kepax no dudaba de que así fuera-

Uno a uno, los cuatro jovenes se fueron presentando. Cuando acabaron, el hombre apuntó varias cosas en un pergamino, y acto seguido se lo guardó en la túnica

-Podéis esperar aquí, mientras se prepara la prueba y llega el resto de aprendices. No arméis escándalo, la mayoría de vuestros compañeros aún duermen

Acto seguido se dió la vuelta y volvió junto a la estatua. Kepax se quedó unos instantes observandole, con los ojos entornados, pero luego se dio cuenta de que Yiltha le miraba de forma inquisitiva

- Eh... Eh??? -Murmuró, saliendo de su abstracción

-Te preguntaba si conocías a alguien

Kepax dió un repaso al jardín. Unos cuantos magos de aire, y alguno de agua, habían aprovechado para madrugar, y practicaban en silencio sus hechizos o murmuraban nerviosos junto con sus compañeros. Los estudiantes también habían madrugado, y parecía que estaban todos los que ese día se examinaban. A Kepax no le extrañaba: Los estudiantes eran bastante meticulosos y ordenados para su gusto. No sería de extrañar que tuvieran todo programado para ese día, incluida la celebración para los que aprobasen, y las palabras de consuelo para los que no pasarán la prueba, al mínimo detalle. Al igual que tampoco era muy extraño suponer que habrían sido los primeros en llegar, probablemente más de media hora antes de la prueba

-No demasiados. Ya sabes, conozco a alguna maga que otra- Kepax sonrió involuntariamente - Pero son todas un año o dos menores. No creo que ninguna este aquí

Yiltha se encogió de hombros, y comenzó a juguetear con un mechón de sus rizados cabellos. Teodor, a su lado, no dejaba de temblar

-Eh- Dijo Kepax acercandose a su pálido compañero -Que tal una pequeña pelea de prueba?

Teodor pareció palidecer aún más. Kepax había intentado animarle, pero parecía que el simple hecho de oir la palabra "pelea" le había puesto más nervioso. Helkin, riendose, le posó una mano encima del hombro a Kepax

-Déjale que se calme, si no, temblará tanto durante la prueba que parecerá estar a varios grados bajo cero. Yo combatiré contigo

Kepax soltó una carcajada

-Por favor, Helkin. Sabes que no durarías ni un asalto

Su compañero sonrio con malicia

-No me pareció tan arriesgado cuando luchastes el otro día contra Yiltha...

-Eh, eso no es justo- Dijo Kepax- Yiltha tenía ventaja. A quién se le ocurre realizar un combate sobre un suelo tan frágil? Ella pesa menos...

-Estoy seguro...-Respondió Helkin con una mueca burlona

Yiltha optó por ignorarles. Parecía pensar en otra cosa

De repente, una puerta se abrió, y varios jóvenes entraron en el jardín. Iban ataviados con ropajes blancos, y charlaban animadamente entre ellos. El organizador, al reparar en ellos, se acercó a su posición

-No sabía que los clérigos realizaban la prueba con nosotros- Comentó Yiltha, sin mudar su expresión

-De vez en cuando no hacen ni prueba. Ya sabes, es una división del gremio tan extraña como la de los estudiantes- Respondió Kepax -En fin... Donde nos habiamos quedado?

martes, 18 de noviembre de 2008

Capitulo 1 (primera parte)

  • Capitulo 1

Los dos hombres caminaban lentamente por los solitarios pasillos del Gremio de Hadak. Uno de ellos llevaba un tomo bajo el brazo, de esos pesados y polvorientos que llevaban tiempo sin usar. La cubierta aun tenia una fina capa de polvo, lo que indicaba que lo acababan de coger tras una larga espera de probablemente algo mas que unos meses. El hombre que lo sostenia, lejos de ser fuerte o imponente, mas bien aparentaba ser débil e incluso mayor, por lo que era curioso ver como mantenia el pesado tomo con firmeza y determinacion, sin flaquear. Una barba que antes habria tenido color avellana, pero repleta de canas y desteñida, lo que la daba un aspecto descuidado, asomaba por el menton de su rostro, cubierto por una capucha de color parecido a esta. El hombre andaba con firmeza aunque cojeando ligeramente de un pie, gesto casi imperceptible debido a los extraños andares de su acompañante

El otro hombre era, desde luego, el centro de atencion. A su lado, su compañero pasaba casi desapercibido. Su estatura era equiparable con su musculatura, y estos dos aspectos parecian definirle perfectamente. Tenia un rostro duro y marcado por algunas cicatrices, y sus ojos eran oscuros y penetrantes, a diferencia de su pelo, que tenia un color rubio platino. Obviamente, aparentaba mucho mas joven que su encorvado acompañante, pero aun asi era facil ver que estaba entrado en años. A cada paso que daba (el cual equivalia al doble que uno de su acompañante), su armadura repiqueteaba con estruendo, rompiendo el silencio del lugar. Los dos personajes gozaban de una extraña presencia, y era facil sentir, si no respeto, al menos aprehension cuando uno se encontraba cerca

El primero parecia estar susurrandole a su compañero

-...be haber una pequeña charla inicial con ellos. Deberían saber con que se van a enfrentar, al fin y al cabo. Sabes que cada año cambia ligeramente, y algunos detalles pueden ser relevantes para que preparen uno u otro aspecto

El otro sonrio, y su imponente voz retumbo al igual que su armadura a su respuesta

-Una charla solo ayudaria a inquietarles mas. Ya saben que cada año cambia. Eso les hara esforzarse mas. Ademas, recuerda que buscamos personas capaces en todos los aspectos de su campo, no solo en unos concretos

El del tomo torcio el labio, en señal de desacuerdo

-Por supuesto. Pero recuerda los resultados del año pasado...

-Los cambios fueron demasiado exagerados. Este año es muy parecido al anterior. Ya se esperan lo que van a tener que realizar- Interrumpio el otro

-...-El primero guardo silencio unos segundos- En realidad, lo que de verdad me preocupa son los metodos que hemos propuesto- Hizo una pausa. El otro espero a que continuara- No se si me explico, pero quizas si debatieramos sobre las costumbres del gremio, podriamos conseguir una prueba relativamente menos peligrosa e igual de ardua

El hombreton lanzo una carcajada. Su interlocutor le miro ceñudo

-Se realista, Ambel. Unos simples aprendices no van a poder hacerse demasiado daño. Y con vosotros delante... Tanto miedo tienes???

El que respondia al nombre de Ambel guardo silencio. El hombreton sonrio

-Tranquilo. La escuela de magia no esta tan mal como para que alguno de tus alumnos salga herido. Y, en cuanto a nosotros...-Lanzo una pequeña risotada- Tenemos los suficientes... "Medios" como para detener a los debutantes si la cosa se pone fea

Acto seguido golpeo sus puños a la vez, uno contra otro. Ambel le miro durante unos segundos, y luego suspiro, resignado

-No cambiaras de actitud hasta que algo se te vaya de las manos. Eres imposible

El hombreton solto una carcajada, pero no añadio nada

Los dos personajes doblaron una esquina y se encontraron de frente a una puerta. En este lugar el pasillo estaba iluminado por ventanas espaciosas y sencillas, por las que entraba abundante luz. En el ambiente se respiraba paz y serenidad. Ambel y su acompañante se acercaron a la puerta sin comentar nada mas, y el primero agarro un manojo de llaves. Abrio la puerta tomandose su tiempo para ello, y entro, seguido de su acompañante. Dentro habia una sala pequeña, un poco agobiante, pero lo suficientemente grande como para que dentro cupiesen 6 personas sin dificultad. En medio de la sala habia un pilar de piedra, que se alzaba hasta la altura de la cintura, e incluso un poco mas. En la cabeza del pilar habia una tablilla unida a este, tambien de piedra, plana y ligeramente inclinada. Ambel la rodeo, y deposito el libro encima. Con cuidado y lentitud, alzo la mano, y las paginas se abrieron solas, como impulsadas por una rafaga de aire, a pesar de que nadie las habia tocado siquiera. Se pasaron con rapidez hasta detenerse en la ultima hoja escrita, y el libro quedo perfectamente situado sobre la tablilla, abierto de par en par. Ambel saco una pluma ornamentada y delicada de su tunica, y dirigio una mirada a su compañero antes de inclinarse sobre el pesado tomo y escribir la fecha

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Debajo, empezo a escribir un parrafo

"Yo, Ambel Vagnoria, Mago de Aire al servicio del emperador, líder de la division de magia del aire del gremio de Hadak, y poseedor de tres condecoraciones por el honorable servicio al imperio, y acompañado por el lider de la division de guerreros del gremio de Hadak, Guerrero de alto nivel al servicio del emperador, y poseedor de una condecoracion por el honorable servicio al Imperio, Pelther Juoldin, doy por iniciada la decimosexta prueba para aprendices del gremio de Hadak, a fecha de , con el consentimiento posterior y el acuerdo de los lideres de las divisiones del gremio, del emperador, y de los propios aprendices que deseen realizar la prueba, con el objetivo de convertirse en la elite de nuestro emperador, "

Acto seguido firmo en el libro. Su firma brillo debilmente durante unos segundos, antes de que Ambel tuviera tiempo de pasarle la pluma a su compañero. Pelther se acerco y firmo a su vez. Su firma tambien brillo durante unos segundos. Los dos compañeros se quedaron un momento en silencio, hasta que Pelther hablo

-Ire a avisar al resto

Luego salio por la puerta. Ambel se quedo solo. Sintio como su piel se erizaba. Siempre, y a pesar de su edad, se sentia emocionado cuando comenzaba la prueba, todos los años. Esta vez no era una excepcion. Suspirando, dejo la pluma al lado del tomo, sobre el pilar, y salio de la habitacion, no sin antes dedicar un ultimo pensamiento a sus alumnos, un ultimo capricho para un hombre que a partir de ahora debia despojarse de todo sentimiento y emocion, para juzgar con claridad y discernir quien merecia convertirse en un heroe, y quien no

Quizas

Quizas fue ayer cuando pude verte, y habría sido el mejor día que hubiera tenido en muchos meses, o mas incluso. Queria decirte que ultimamente me cuesta sonreir, si no es con las pinzas del protocolo y de la propia preservacion de mi intimidad. Tambien que no tengo muchas cosas en la cabeza, porque tenia tantas que acabaron por reventarse las unas a las otras, saliendo volando a presion del hueco que ahora hay en mi craneo. Un hueco oscuro, por cierto. Hace poco lei un comentario sobre algo de que el sol saldra pronto, de que la oscuridad se ira, y de no se cuantas mas promesas que muchos necesitamos oir de vez en cuando para sentirnos mejor. Puede que sea verdad, pero la verdad es que ultimamente me siento bien en la oscuridad. Se que acabara por engullirme, pero bueno, tampoco soy tan debil como ella cree, asi que si hay que caer, caere luchando. Al menos eso dijo William Wallace, o Walas, como se dice en español

Pero en fin, supongo que te aburre que te hable de mi vida. Suele ser tan monotona como siempre. A veces me pongo a pensar y me doy cuenta de que cuando escribimos escribimos lo mismo pero con distinto acento. La gente dice que dos dias son diferentes, pero cuando miras desde lejos te das cuenta de que a grandes rasgos siguen el mismo patron. Lo que dije ayer es lo que dije hoy, solo que dado la vuelta. Aunque a veces si que cambiamos. O eso dicen. Es bonito pensar que no todo es una linea recta, que hay puntos en medio para hacer el trayecto mas facil y sencillo, o, al menos, mas entretenido. Y, a veces, mas costoso. Pero... Que es la vida??? No es mas que una lucha constante. No somos observadores, por mucho que queramos serlo (te lo digo por experiencia), tenemos que meternos hasta el cuello en las paginas de nuestra propia historia. Porque somos nuestra propia tinta, y con sangre vamos escribiendo parrafos y parrafos hasta que al final se acaba el combustible. "Y entonces, que???", pense ayer, mientras miraba al techo y me preguntaba por octaba vez en la ultima hora cuando iba a ser el dia en el que iria a hablar contigo. Pues nada. Supongo que negro, y punto. Aunque muchos dicen que los bolis destintados tienen un lugar en el otro mundo, la cruel realidad es que todos van a la basura

O no

Me encanta contradecirme, te das cuenta??? De hecho, creo que puedo llegar a volverme loco si sigo asi. Demasiado pensar, demasiado pensar, y encima en nada productivo. Asi soy yo, si algo no tiene sentido, entonces me gusta. Ahora, seamos practicos y miremos atras: Cuantos logros he conseguido en mi vida??? Bueno, hasta hace unos minutos, esa idea no me preocupaba. Ahora quizas me preocupa un poquito mas. Absurdo hasta cierto punto, pero totalmente logico, por otra parte. Mierda, ya estamos de nuevo con las contradicciones. Al menos me queda el consuelo de que podre intentar agarrarme a ti cuando realmente te necesite, cuando me atreva a verte de una vez. Si es que sigues ahi, claro... Porque a veces me da la sensacion de que ya te he perdido. Seria algo bastante sencillo, si te pones a pensarlo, es usual que la gente acabe hasta el nabo de mi

No, tranquilo, no tengo la vena "emo". Simplemente pienso. En que??? Muchas cosas. Si escribiera a la velocidad de mi mente escribiria paginas y paginas, y mas paginas... Claro, que sin sentido. Si es que esto tiene sentido. Al menos si para mi. Pero me pongo a pensar, y... Si esto es solo para mi... Porque lo cuelgo en un blog???

Seguro que es algun pequeño trauma del subconsciente, o algo asi

En fin, solo queria decirte que te echo mucho de menos. Que quizas algun dia pueda volver a recogerte, que quizas podamos hablar y pueda por fin tenerte conmigo de nuevo, si es que alguna vez te he tenido

Mientras, te seguire guardando con llave en esa cajita que tengo dentro, mientras coges polvo y te marchitas

Hasta siempre

Remite: Un hombre que olvido sus sueños